El Instituto San Isidoro de la ciudad de Sevilla comenzó su labor docente a mediados del siglo XIX, exactamente en 1845, bajo el nombre de Instituto Provincial de Segunda Enseñanza. Este instituto creado a partir del "Plan Pidal" comenzó su andadura dentro de la Universidad Hispalense y estuvo vinculado a ella hasta 1859. Siguió compartiendo dependencias con la universidad hasta 1868, año en que fue trasladado al antiguo convento de San Pedro de Alcántara, donde se encuentra aún hoy, siendo remodelado por completo en 1963.
Fue el único existente en la ciudad hasta el año 1933, en que se crea un segundo instituto, por lo que a lo largo de su historia han pasado por él gran cantidad de personajes importantes de la historia local y nacional, a la vez que fue acumulando numerosos tesoros para su uso docente. En sus fondos históricos educativos se conservan libros que datan desde el siglo XVI, aparatos antiguos de laboratorio de física, de química, así como una notable colección de mapas, maquetas geológicas, modelos biológicos, láminas científicas, minerales, fósiles y herbarios.
En la tarea de recuperación y conservación del material científico del Departamento de Biología y Geología, en el Libro de Memorias del Instituto General y Técnico de Sevilla se localizó la procedencia del más antiguo de sus dos herbarios. En la Memoria correspondiente al Curso 1907-1908, escrita por D. Juan Pérez López, catedrático numerario y secretario del Establecimiento, en las páginas 9 y 10 aparece lo siguiente:
"8º Botánica.- Poco antes de fallecer el eminente Profesor de Bellas Artes y Director de la Escuela de Sevilla, D Claudio Boutelou, ofició á la Dirección de nuestro Instituto, ofreciéndole para que se conserve en el Museo del mismo una valiosa colección botánica comenzada á formar en 1790 por el padre del dicho señor y aumentada por su hermano, consistente en 5000 especies, clasificadas científicamente, así como unas 700 especies más, sin clasificar, escogidas por D. Esteban Boutelou y donadas á este señor por botánicos españoles y extranjeros procedentes en su mayor parte de Extremadura y del Real Coto del Torno del Grullo.
Aceptado el generoso donativo, del que oportunamente se dio cuenta al Gobierno, se han construido para custodiar la expresada colección dos anaqueles con la inscripción del nombre del generoso donante y cincuenta y dos cajas de madera con doble abertura, ingeniosamente dispuestas, para el fácil manejo de las carpetas en que se han colocado las plantas de la colección.
El Instituto aprovecha esta oportunidad para dedicar el testimonio de su gratitud al esclarecido patricio que tan grata memoria ha dejado en esta ciudad, por su saber y dilatados servicios a las Ciencias y a las Bellas Artes".
En 1943, este herbario histórico fue trasladado al Museo de Ciencias Naturales de Madrid en calidad de "Depósito", y en 1972 pasó a formar parte del Herbario de la Universidad de Sevilla (Sánchez Lancha, 1974); en nuestro Centro queda una pequeña parte puramente testimonial del mismo.
El otro herbario procede del Museo Nacional de Ciencias Naturales y el Jardín Botánico de Madrid, fue enviado al Centro como apoyo a la enseñanza de la botánica; es de 1934 según consta en las etiquetas de los ejemplares recolectados. Al tener lugar su llegada al instituto en los años de la Segunda República española, y como fuera habitual en esa época, en las etiquetas de los pliegos no aparece el título de “Real” que tradicionalmente ha tenido la institución de procedencia. Este herbario se encuentra actualmente en buen estado de conservación.
En los años referidos el Museo Nacional de Ciencias Naturales elaboraba herbarios escolares para enviarlos a los distintos institutos de segunda enseñanza de España, pero parece que el objetivo de la tarea propuesta no pudo ser culminado en su totalidad, dado lo difícil que resulta en la actualidad encontrar información acerca de tales herbarios. Dos institutos históricos de Madrid, el I.E.S. Cervantes y el I.E.S. Isabel La Católica, son los únicos que poseen un catálogo (que se puede consultar online) de los restos que poseen de estos herbarios escolares de los años treinta, el primero posee 136 pliegos y el segundo 123.
El herbario que se encuentra en este instituto sevillano podría ser el más completo que se conserva, consta de 225 pliegos. Éstos se encuentran conservados en tres cajas de doble abertura, dentro de ellas las plantas están sujetas con cintas a una cartulina blanca con una funda protectora de papel color pardo. Cada pliego posee una etiqueta escrita a máquina con el nombre de la planta, su lugar y fecha de recogida. Es de destacar que el herbario principal se completa con dos colecciones complementarias, una de ellas es un pequeño herbario de algas procedentes de la Estación Biológica de Marín (Pontevedra) y la otra una colección de láminas de dibujos de Hongos.
Por iniciativa de la Dirección de Centro y del Departamento de Biología y Geología, se ha digitalizado y catalogado este herbario que cumple en estas fechas 80 años. Esta labor ha sido realizada a lo largo del curso 2013-14. En la actualidad nadie duda de la importancia que tiene el mantenimiento, conservación y puesta en valor de las colecciones científicas para evitar su pérdida y deterioro. La digitalización es una de las técnicas utilizadas para dar a conocer la existencia y el contenido de estas colecciones singulares. Mediante el uso de las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación se pretende salvaguardar y revalorizar este patrimonio creando un museo pedagógico virtual sobre la enseñanza de las ciencias naturales. La realización de fotografías de alta calidad permite llevar un registro de cada componente y utilizarlas para consultas como fuente de documentación para profesores, alumnos e investigadores.